Las
Palmas Atlético, la pasada temporada, fue líder del grupo canario de Tercera
División y en la fase de ascenso se impuso al Tuilla, demostrando ser un equipo
con carácter, oficio y ganador. Esta temporada afrontaban la categoría recién estrenada, con nuevos objetivos y nuevas metas pero siempre, con la bandera de la ilusión
y la juventud, de unos chicos que sueñan con llegar algún día a jugar en el
Estadio de Gran Canaria y formar parte del primer equipo, como esta temporada han logrado sus compañeros
Asdrúbal Padrón y Tana.
Como
en todos los equipos la llegada del verano supuso una nueva partida de ajedrez
en la que nueve de sus jugadores, claves en la fase de ascenso, fueron llamados
a las filas del primer equipo para realizar la pretemporada e intentar ganarse
un puesto. Mientras que Cristian Herrera, Néstor Gordillo, Omar Fleitas y Alex
Guanche, decidían cerrar su etapa de amarillo y volar por cuenta propia.
Por
lo que falto de soldados, las tropas de Víctor Afonso, realizaron una
pretemporada discreta en la que se enfrentaron a equipos de categoría inferior
pero en la que ya se empezaban a ver algunos destellos de lo que podía ser este
equipo, el entrenador se mostraba optimista y aseguró, “a rey muerto, rey puesto. Los filiales funcionan así”.
Con
el cierre del mercado de fichajes, regresaron a sus filas David Simón y Jesús
Valentín, mientras que Jose Artiles, Leo, Carlos, Dani Lorenzo y Alejandro
Rodríguez, más conocido como “Pipo”, continuarían entrenando con el primer
equipo pero disputando los partidos con el filial.
David Simón / Foto: www.tintaamarill.es |
Con
estas piezas y los nuevos fichajes, parecía que tenían una plantilla
competitiva y formada casi en su totalidad por jugadores canarios. La sorpresa
llegó el día del estreno ante el gran favorito de la categoría y candidato al
ascenso, el Huesca. Podríamos decir que los amarillos regresaron a la categoría
por la puerta grande, con un fútbol fluido, vertical, rápido y asociativo.
Muchos
creían que esto sería flor de un día, y que pasaba debido a que el resto de
equipo no conocían la forma de jugar de los amarillos. Pero poco a poco, y con
paso firme los pupilos de Víctor se fueron afianzando en la categoría y
haciéndose con el primer puesto de la clasificación. Es un equipo muy joven
pero que tiene las ideas muy claras y sabe que debe hacer en cada momento,
además, en este equipo juegue quien juegue, sabes que lo va hacer
bien.
Uno de sus grandes secretos es el
bloque, en bloque defienden y atacan, esto ha hecho que sea una de las defensas
menos goleada de toda Segunda División B, además de ser el mejor visitante,
datos que quedan para la galería pero que añaden valor a la gesta que están
haciendo estos chicos, que cada vez se auto exigen más.
Sería
injusto destacar a unos jugadores sobre otros, pero más allá del trabajo
colectivo podríamos señalar a Roque Mesa, que se ha convertido en la brújula de
este equipo, es quien dirige el ataque y se emplea a fondo en defensa, y verlo
como aguanta el balón con varios defensas encima, es realmente impresionante. A
José Artiles, quien con su desborde y chispa por la banda izquierda, fulmina a
las defensas rivales y cada vez que el balón está en sus botas, acaba generando
un enorme peligro. Y finalmente, Héctor Figueroa, el pichichi de este equipo un
hombre que lleva el gol en la sangre, es quien lucha y fija a las defensas contrarias,
un trabajo invisible que se está viendo recompensado con los goles.
Ellos
son una parte insignificante dentro de un bloque en el que con Dani
Lorenzo, zamora de la categoría, David Simón, Carlos, Ayoze y Medina, que forman
la defensa más sólida del campeonato. Le sumamos a Tyronne, Leo,
Jordi, Nili, Benito, Adrián, Germán, Ale Rivero, Jesús, Enrique
Castaño, Matías, Borja, Leto, Álvaro Rodríguez y Alejandro Martín, podíamos decir que es una de las mejores plantillas y que además, cuenta con una sólida base de cantera.
Las Palmas Atlético / Foto: www.tintaamarilla.es |
Estos
jugadores forman una nueva hornada, muchos en poco tiempo tendrán cabida en el
primer equipo, mientras tanto, le van brindando alegrías a la afición
amarilla con la vela chica y haciendo que el nombre de las Palmas se extienda por todo el panorama futbolístico, así como muchos representantes de grandes equipos ya van apuntando sus nombres en sus agendas. Pero ellos tienen la mente puesta en un ascenso improbable en estos momentos, pero que el tiempo dirá, porque este equipo no tiene techo.