16 de noviembre de 2018

CRÓNICA || UN PUNTO QUE NO SABE A NADA



En un partido trascendental para el técnico de la UD, el de El Arahal sacó de inicio a Raúl; Lemos, Deivid, Cala, De la Bella; Timor, Galarreta, Blum, Tana, Araujo, Rubén. Volvió Timor al mando con Ruiz de Galarreta en el centro, no tirado en banda; Blum en la derecha, Araujo en la izquierda y Tana de mediapunta.

El guion previsto, la UD agazapada; el Granada con el balón. La primera llegada clara del partido se produjo en el 12' en una falta ensayada de los andaluces que ejecutó el examarillo Ángel Montoro, tocó Álex Martínez y remató Adrián Ramos en escorzo saliendo el balón lamiendo la portería de Raúl. La primera llegada amarilla, un tiro de Tana, lo detuvo, sin apuros, Rui Silva. 

La inercia se mantenía y un chutazo de volea desde fuera del área de Víctor Díaz lo detuvo Raúl mandando el balón a córner. En el 33' un disparo de Adrián Ramos desde fuera del área salió rozando la escuadra de la portería de Raúl. 

Al borde del descanso, un disparo de Araujo desde el vértice del área fue desviado por Rubén Castro con toda la intención y sorprendió a Rui Silva, haciendo el primero de la UD. 

Así se llegó al descanso, el equipo estaba a merced del Granada, pero iba por delante. El Granada sumaba las ocasiones y la posesión y la UD el gol. Siendo prácticos, bien; si la mirada es larga, mal asunto. El equipo sigue sin proponer, sigue dubitativo atrás, pero iba por delante. 

A los dos minutos de la reanudación se lesionó De Galarreta y acto seguido el Granada empató en un saque de esquina en el que Adrián Ramos se adelantó a Sergio Araujo y sorprendió a Raúl Fernández en un remate al primer palo. 

Tras el impasse de los dos goles el partido volvió por el mismo cauce. El Granada con el balón y la UD esperando su oportunidad, generando más que en la primera parte, pero sin ser  claramente dominadores. 

Los acontecimientos, de pronto, en un partido anodino, se desencadenaron: la UD marcó el segundo tras una jugada en la que el balón suelto tras un control de Maikel Mesa le llegó a Sergio Araujo. El Granada tuvo un penalti que Raúl Fernández detuvo a Antonio Puertas y posteriormente el conjunto visitante anotó el empate en un error de Timor en el despeje que propició el centro de Adrián Ramos y el fallo de Raúl que aprovechó Rodri, quien acababa de entrar y el partido concluyó así.

Este empate supone el cuarto consecutivo de un equipo que sólo ha ganado un partido de los últimos ocho y que sigue sin demostrar todo el arsenal que atesora en su plantilla. 






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